Synopsis
El reciente atentado contra un senador y precandidato presidencial volvió a visibilizar el uso de niños sicarios para cometer asesinatos en Colombia. Una tragedia irresuelta desde hace décadas, mientras algunos proyectos culturales buscan una salida para esos menores de barrios marginales, como la red de escuelas de música de Medellín, que ha beneficiado a más de 37.000 niños desde 1996.