Synopsis
Están en peligro por la crisis de las clínicas dializadoras privadas: el Estado les debe unos 200 millones de dólares. Más de 10 clínicas se declararon en bancarrota y otras sobreviven postergando el pago de salarios del personal médico y parte de los insumos. Otras han llegado a reducir el tiempo de los tratamientos de los pacientes. Más de 1.000 personas han muerto, denuncian pacientes.